Bienvenido a casa.

Bienvenidos al país de las maravillas, bienvenidos al México surrealista. Bienvenidos a la teoría relativista, donde se vive en el 2012, 1512 y 1968 al mismo tiempo. Bienvenidos al gobierno de López Portillo y Sasha Montenegro. Bienvenidos al país donde los libros cuentan historias, pero no cuentan Historia. Bienvenidos al autoritarismo, al fascismo, al retroceso cultural.

Bienvenidos. ¿Se siente como regresar a casa?
Una mezcla de tristeza y risa, tristeza por el salto al pasado, risa por la situación en la que nos volvemos a encontrar. Así que sígamos viéndolo con ironía, sigamos viéndolo con humor, tendremos que hacer chistes sobre la "gaviota" y sobre "el pelón", habrá que confíar en los medios. Habrá que insultar a los perdedores, Porque la mayoría siempre tiene la razón, ¿Verdad?

Habrá que perder la esperanza, habrá que romper los juramentos, traicionar los principios, robar porque si no lo hago yo, lo hará el de atrás, habrá que poner el orden por encima de la calidad de vida y la educación, habrá que vender nuestros cuerpos y nuestras mentes así como hemos vendido el voto y, por lo tanto, al país...

¿O no?

Suena tan ¿anti-mexicano? ¿extraño?

Qué tal si.... ¿Qué tal si cambiamos? Y no nos dejamos llevar por los demás, sí, eso ha de funcionar. ¿Qué tal si nos convertimos en el México que queremos ver? ¿Qué tal si luchamos contra la violencia con educación y respeto? ¿Qué tal si dejamos de consumir drogas? ¡De manejar borrachos! ¡De meternos en la fila! ¡De copiarnos en los exámenes, de pagarle al maestro!

¿Qué tal si aceptamos que tenemos errores y que podemos mejorar? ¿Qué tal si aceptamos que todos somos seres perfectibles? ¿Qué tal si aceptamos que somos vulnerables?

Habrá que luchar, habrá que creer, pero sobre todo: Habrá que cambiar.

Felicidades a todos aquellos que le han dado en la madre al país, porque nos han dado una oportunidad a TODOS de demostrar que somos más que un voto, que no somos un número. Que nos preocupamos por nuestros hermanos y que trabajamos para mejorar el país. Gracias, priístas, porque nos han dado la oportunidad, nos han dado el reto de mejorar y defender el país sin el apoyo del gobierno.

Nos han dado la oportunidad de demostrar que los que queremos cambiar no estamos detrás de ninguna bandera o escudo.

Yo soy Rafael Alejandro Bautista Vera. Soy feliz de haber nacido mexicano, y haré todo lo que esté en mi poder por sacar a mi país adelante. Incluso si mis compatriotas quieren que siga en el hoyo.